Thursday, May 14, 2009

¿Quien es Angélica Mora?




Silvio Rodríguez protestó amargamente por la negativa del gobierno de Estados Unidos de otorgarle una visa para viajar a Nueva York. Aquí el cantautor cubano pensaba tomar contacto con artistas que celebraban la llegada de los 90 años de Peter Seeger, connotado músico estadounidense.

El evento se llevó a cabo el pasado domingo en el Madison Square Garden bajo el título de "Concierto Clearwater".
Lo integraban grupos artísticos que propician la limpieza del medio ambiente y que protestan contra el capitalismo, culpable -según ellos- de todos los males del planeta.
En la reunión se juntaron decenas de importantes figuras artísticas liberales, entre ellos Bruce Springsteen, la legendaria Joan Baez y David Mathews, que siempre han estado contra el sistema (anterior, me imagino).

Silvio Rodríguez se habría encontrado en su salsa, feliz nadando en el caldo efervecente de nuestros izquierdistas de nota. Dando, el mismo, declaraciones en contra del capitalismo y loas a Fidel Castro y el sistema imperante en la Isla, que con tanta facilidad le ha concedido su tarjeta blanca pa' que vaya pa' donde quiera...

En el fondo ese ES el asunto Silvio.
Tu eres el cantautor cubano por excelencia. Uno de los más claros exponentes de la política de los hermanos Castro y hoy alegas amargado contra el sistema de los Estados Unidos que no te permitió la entrada a la Tierra del Imperialismo.
Sin embargo no has alegado nunca que los artistas de aquí, como Willy Chirinos y Gloria Estefan, no puedan entrar al paraíso comunista.

Tampoco, con tu tremenda sensibilidad, no te has tomado el tiempo, como en el pasado, para crear un cántico a los compatriotas que quieren salir de la Isla. Que golpean una y otra vez los barrotes invisibles, como Edgar y otros miles y miles que desean salir de Cuba libremente y poder regresar cuando quieran.
Menos aún a los que a la inversa desean ir a ver a sus familiares, entre ellos el caso de una madre que murió en su lecho llamando al hijo ausente, que no pudo pasar del aeropuerto José Martí, por impedírselo las autoridades cubanas.
¡Ese es un tema real, Silvio, como para ponerle música...!
¡Ese es Dolor de Verdad!.
Otra cosa es ir a juntarse "con pájaros de un mismo plumaje". Eso no es nada. En eso no hubo Crisis, no hubo Dolor de verdad.

Por eso, Silvio, mientras el régimen de Cuba no deje fluir el libre y normal tránsito de gente que quiera salir y entrar a la Isla, Estados Unidos está en su derecho a hacer lo mismo. No debe permitir estos simulacros de hermandad, que pretendiste todo ultrajado, hacernos tragar.
¡Para que veas, Silvio, aquí otra cosa es con guitarra!

Alineación al centro

UNA HISTORIA TRISTE SOBRE EL TOMATE CUBANO


Desde hace años, el consumo del tomate en Cuba se ha basado en gran parte en su adquisición en el exterior. Las fábricas de conservas han funcionado con compras de la pulpa en la lejana China, por ser insuficientes las cosechas nacionales. También se han importado grandes cantidades de pasta, salsa, puré y kétchup de distintos países, entre ellos Estados Unidos, España, México e Italia, por insuficiencia de la producción interna.
Esta historia de compra en el exterior de un artículo agrícola perfectamente producible nacionalmente no sorprende, cuando se conoce que el 84,0% de los suministros agrícolas necesarios para la alimentación de los cubanos son adquiridos fuera de las fronteras, lo cual constituye uno de los factores por lo que el comercio exterior cada año impone records en sus déficits y, por tanto, la situación financiera empeora continuamente. Hasta el azúcar se importa de Brasil y Colombia, y muchos productos agrícolas se adquieren en Estados Unidos, que se ha convertido en el principal suministrador de alimentos, una verdadera vergüenza como lo calificara certeramente el nuevo Ministro de Comercio Exterior e Inversiones, Rodrigo Malmierca, en declaraciones formuladas a principios de Abril.
Este año, al parecer, debido a óptimas condiciones climáticas, la producción de tomate ha sido excepcionalmente alta. Pero para que no escasearan las dificultades, según reportes de la televisión, las fabricas procesadoras no tienen capacidades suficientes para enfrentar la oferta de la solanácea ni la organización de acopio puede asegurar la recogida a los productores, en ocasiones por falta de cajas y otras por carencia de transporte o combustible.
Además, las fábricas están en pésimas condiciones, como se ha podido apreciar en la televisión. Tienen maquinarias con más de 60 años de explotación sin haber recibido el mantenimiento adecuado, por lo que las conservas se producen con muchas dificultades y en condiciones higiénicas muy deficientes; el ambiente laboral de acuerdo a la vistas se asemeja bastante a los descritos por Charles Dickens en sus novelas respecto a las condiciones en la Inglaterra Victoriana del Siglo XIX.
Una ayuda a esta situación hubiera sido bajar los precios en los mercados para el gustado vegetal, con lo cual muchas personas habrían elaborado sus conservas como ha ocurrido en años anteriores. Pero, al menos en La Habana, eso no se ha realizado en un grado satisfactorio para estimular la demanda.
Por tanto, han ocurrido pérdidas considerables del producto cosechado. A ello adicionalmente contribuyó que en la capital y posiblemente en otros partes del país, el gobierno ha cerrado la mayoría de los lugares de venta de productos agrícolas luego de los tres huracanes, sin que se hayan reabierto, lo cual ha dificultado la comercialización, y se ha creado una concentración en determinados plazas. Esto ha incidido de forma negativa en el precio al consumidor, que en algunos establecimientos no ha bajado de los 5 pesos la libra (460 grs.) a pesar de las altas cosechas.
Hay que subrayar que pasada la zafra del tomate, las conservas tendrán que adquirirse fundamentalmente en las tiendas de venta en divisas del Estado, pues desde hace muchos años dejaron de ofertarse en el marco del racionamiento, y son prácticamente inalcanzables en moneda nacional. En las referidas tiendas, un litro de puré de tomate marca Premium, de producción nacional, se vende a 3.00 pesos convertibles (CUC) equivalentes a 75 pesos en moneda nacional (MN), o sea 18.0% del salario medio mensual (SMM), 414 pesos al cierre del 2008; un litro de Kétchup Del Monte cuesta 5.95 CUC, 149 pesos a la tasa oficial, más de la tercera parte de apuntado SMM. Si el kétchup es de la marca RED and White de procedencia norteamericana el precio es algo más llevadero, pues un pomo de 24 onzas cuesta 2.20 CUC o sea 51 pesos MN, algo más del 13,0% del SMM.
Como puede apreciarse en el caso de la zafra del tomate de este año, la problemática de la agricultura cubana hay que analizarla de forma integral, no sólo tomando en consideración los elementos agrarios, sino también el acopio y, en muchos casos, el procesamiento para consumo posterior. Mientras no se elaboren planes integrales, situaciones análogas ocurrirán con otros productos en detrimento de la economía y el nivel de vida de la población.

La Habana, 11 de mayo de 2009

"La voz en Suecia
de los hijos rebeldes de la revolución"


Oscar Espinosa Chepe
Economista y Periodista Independiente




Tuesday, May 12, 2009

PARA LAS MARCELAS Y CAMARILLAS



Me ataca Marcela.....**que no te quepa la menor duda, yo soy mas cubana que tu y no tengo ningun odio por dentro como tienen todos ustedes el mal llamado exilio patriotico.....**

Marcela DE QUE TE QUEJAS?

Yo, no te regale la revolución ni te impuse ese sistema.

No te prometí una Reforma Agraria para que hoy tengas solo tierra en las uñas.

Mucho menos te engañe con la reforma urbana y que hoy tengas un barracón inmundo.

Ni te prometí estudios gratis y que lo tengas que pagar con trabajos voluntarios o con la aceptación de que te alquilen como fardo.

Yo no te quite el pasaporte de la libertad que no te permite viajar libremente.

Yo no intervine los Hoteles lujosos y las empresas privadas; ni te prometí que todo era para el pueblo y hoy no puedas ni pisar la alfombra que cubren los Meliá.

Yo no te prometí que ibas a ser reconocida por chivata ni que te iba a dar un premio por tus años de servicio como vigilante. Ni te prometí una semana en Varadero por espiar a tus vecinos.

Yo no te convertí en asesina al empuñar el fusil en un paredón.

Yo no te quite la pasta de dientes, ni el jabón; ya lo dijo el Che..que no hacían falta calzoncillos.

Yo no te enseñe a gritar “*Patria o Muerte” para que tus tripas enten gritando como Pánfilo…JAMA.

Yo me fui porque tu misma me hiciste la vida imposible. Porque me vigilaste y me apedreaste el día que me fui; total para ahora estar mandándole recuerdos a tu vecino en la Yuma para que te enviara un telegrama.. $$$$.

Cuando me fui, no me dejaste ni hablar ni decir Adiós o hasta luego, solo me robaste todo lo que había en mi refrigerador y el Kotex que deje en una gaveta.

Ahora, si hueles la carne de puerco te paseas con el plato en la mano. Antes no, antes si podías la intervenías para comértela entre los pinchos.

Yo no te odio…yo siente pena y lastima por ti. ¿Sabes por que? Porque yo soy libre de pensamiento, soy libre de volar al más íntimo rincón del mundo y tú, pobre diabla solo te queda un salario miserable por atacarme.

Cuídate Marcela..Cuídate mucho y ojala la lengua te quepa en el sarcófago que te va a envolver un día. Tu no eres inmortal…no hay nada mas cierto que un día tras otro y tal vez un día, nos encontremos en el derecho a lo que es mío también, la Patria.

Y ojala ese día cuando tengas libertad no te quepa dentro del corazón porque no sabes que es la libertad.

Y vuelvo y te pregunto…Marcela de que te quejas?

Acaso no eres libre o te tienen de lengua larga y te arde de tanto usarla contra todos o contra mí.

¡Vive y cuida tu revolución porque tu miseria no te la regale yo!

Yo estoy defendiendo tus derechos, pero tú y tantos como tú; nos han bloqueado ese deseo de libertad para ti.

Yo no te quite nada, Marcela…me fui con las manos vacías. Ni deje nada para ti…no mas le deje a la Patria cubana dos fusilados en nuestra tierra, porque es mía también.

Y si fuera a ser mas honesta..te diría: Marcela yo no te enganche a Fidel….Tu te lo dejaste enganchar con tu doble moral.


Monday, May 11, 2009

La Prensa

8.5.09

La prensa
El movimiento y distribución de las noticias es algo que me llama mucho la atención y a veces, me es imposible saber cuales noticias estarán de punteras en el medio periodístico. Muchas de estos reportajes que creí irían a ser de mayor importancia y causarían revuelo internacional, se vieron opacados por una noticia que, no menos importante, pero de farándula al fin y al cabo. Las fotos de el Padre Alberto Cutie, abarcaron las primeras planas de periódicos en el mundo entero y no cesaron los medios ni lo han hecho aun, de plantear si se debe prohibir el celibato en la iglesia o no; y de cuales fueron las posibles causas de que este afamado cura de Miami Beach, se embarcara en esta doble vida romántica que llevara con la que se dice supuesta novia, y Dios.No le resto importancia a la noticia, pero este debate ya lleva demasiado tiempo en la palestra para que se le de tan poco cubrimiento a lo que a pasado en Cuba en solo esta semana, incluso hasta en los noticieros televisivos y radiales hispanos de este país.



En esta semana Antunes escribió una carta protesta a los congresistas negros que visitaron Cuba. La carta fue llevada al congreso por su hermana, y esta fue, oficina por oficina de cada uno de estos congresistas, entregándoles copias de dicha protesta personalmente a cada uno de los que la recibieron. A aquellos que no se dignaron a recibirla – pues hubo unos cuantos- como la organizadora de esta comisión de la alianza negra de USA, les dejo una copia en su escritorio. Antunes les replica sobre la doble moral y la poca valentía, por el haberse reunido con la dictadura, pero no dignarse a también reunirse con los presos y disidentes, que muchos, negros como ellos, luchan por una democracia justa en la isla. Les plantea también, que siguen en su huelga de hambre de dos meses y medio y que no segaran hasta que cambios precisos sean vistos. No tengo la carta conmigo, pues como la cobertura no ha sido importante, me fue imposible conseguirla. Si alguno de los lectores la consigue, por favor háganme saber, para publicarla. Esta valentía y suspicacia de Antunes, demuestra su entereza política y el valor que tiene para una Cuba futura.


En otra noticia muy poco dada a la luz una cubana, se desnuda en las calles como protesta a la difícil situación en la que vive y la imposibilidad de solución alguna. Muchas de las fotos están en algunos websites, pero por el contenido grafico no creo que me atrevería a publicarlas. Unos dijeron que era una loca, que le faltaba un tornillo y que los pocos medios que se hicieron eco de esta noticia solo tergiversaban la nota, para darle una connotación política. La verdad es, que la depresión del pueblo cubano es muy grande y que Cuba hoy presenta una de las mayores tazas de suicidio en el mundo. El ser humano al verse amarrado, sin opción de replica y ninguna solución a la vista, puede llegar a los pensamientos mas obscuros que uno pueda imaginarse. La criminalidad aumenta cada día en la isla, y los reportes sobre esta, ya ni so producidos. Esta señora la cual protestaba como dios la trajo al mundo, representando el vacío de aquel que ya no tiene nada más que perder que su pudor, es un bastión más, de los que ya no ven más final que un cambio.


Por ultimo, en Miami, un señor que aspira a un puesto en el condado, ha tenido una idea que, si bien le podría traer un gran costo político, también le podría veneficiar increíblemente. Este político cubano –apartando la idea de si se puede beneficiar o no- es de los primeros en realmente enfrentar directamente a la dictadura castrista y obviar la orden implantada hace mucho tiempo por el gobierno americano, de mantener la estabilidad en la isla y no crear enfrentamientos directos entre los dos países. La idea de este -me parece muy patriota- señor, fue la de pedirle permiso a los Estados Unidos para viajar a Cuba no para visitar su familia, ni la razón que tienen muchos otros apátridas, de simplemente ir de turismo, su idea, es la de visitar la isla para reunirse con los presos y los disidentes de la isla. Expresa el, que ya que Raúl Castro se “mostró” disponible a aperturas y tocar estos temas, por que no empezar esta ofensiva democrática. Me parece que esta es la intención política que necesitamos y de la que he hablado en post anteriores en esta bitácora. Los cubanos en nuestra patria ya están cansados, se ve la disponibilidad de estos de tomar la iniciativa. La necesidad de que tienen de ayuda y dirección objetiva hacia un proceso democrático, queda demostrada con todos estos sucesos. Las damas de blanco, los disidentes, presos, bloggeros y jóvenes rebeldes, ya salen a la luz del día sin el miedo común de épocas pasadas.Si ya los miedos van desapareciendo y la mentalidad de todos se va programando hacia una acción y no al sedentarismo inútil, debemos tener ideas como estas que aumentarían la insurrección popular y el final de ese yugo comunista estaría muy cerca. También debería ya cambiar la mentalidad de la prensa y de la opinión mundial hacia Cuba. No es aceptable que una noticia como la del Padre Alberto se lleve las primeras páginas, cuando un grito tan ensordecedor en busca de solidaridad, esta saliendo de la isla.


Ya estoy cansado del amarillismo, de los medios y del morbo de quienes lo consumen. Tenemos que ser más humanos y volver a los valores de nuestros antepasados. El amoralismo nos embarga a todos en estos tiempos, pues hoy se ve como normales muchas cosas que épocas atrás nos hubieran removido el tapete. Los valores familiares, el sentir por el prójimo, el civismo, los valores religiosos, etc., están en extinción. Que nuestros valores no mermen y que la ayuda a nuestra patria siga siendo el constante clamor de nuestra alma deben ser nuestras mas constantes plegarias.


Carlos M Paez

Tuesday, May 5, 2009

Pero ..LA BRONCA DE LOS CUBANOS ¿CON QUIEN ES?

Pero ¿la bronca de los cubanos, con quién es?: ¿con los norteamericanos? Que yo sepa el oficial que me interrogó y me amenazó conque me pudriría en la cárcel o con el destierro forzado y luego dio órdenes de hostigarme y perseguirme por haber propagado ideas contrarrevolucionarias, no estaba bajo las órdenes de la C. I. A. ni del F. B. I. sino del Ministerio del Interior de Cuba. Ni era un agente de los servicios secretos del país más poderoso del mundo el que intentó matarme al atropellarme con su jeep en la calle Panorama del barrio capitalino de Nuevo Cerro, el 28 de octubre de 1996. Y, antes, en 1992, cuando, a fin de llevarme a una reunión urgente en la direccion de la escuela, me sacaron abruptamente del aula donde impartía una clase sobre el origen del idioma español, no vi por ninguna parte a nadie de la Junta Escolar de Miami en contubernio con el alcalde del condado Dade y el Gobernador de la Florida. No. Ocurrió en Cuba y fueron cubanos quienes sorpresivamente me leyeron y dieron a firmar un documento a través del cual el Ministerio de Educación, en contubernio con la Seguridad del Estado, decidía expulsarme de mi puesto de maestro, por causa de mis convicciones y principios políticos. Allí sólo vi a la jefa de cátedra de Español y Literatura, a Sarah Sevilla ‒representante del Partido‒, a la directora y a la secretaria del Instituto Preuniversitario Antonio Guiteras y a dos oficiales de la tenebrosa Policia Politica. Y sigo enumerando acontecimientos: No pertenecían a ninguna institución u organización ni empresa ni cuerpo militar de los Estados Unidos los que, siendo yo muy joven, me obligaron a dejar mi casa y alejarme de la influencia de los míos para llevarme a trabajar gratuitamente en la agricultura, cada año y durante un mes y medio ‒y a veces más‒, bajo el pretexto de la educativa y aleccionadora combinación del estudio y el trabajo. Ni mis vecinos soplones del Edificio Naroca ‒Georgina, Chichita, Roberto, Verena, Niurka (quien vive ahora en Miramar, muy cerquita de Miami), Nadia, Rosa la del quinto piso y otros a los que Dios ya les pasó o les pasará la cuenta‒ eran nativos de la nación fundada por Washington. Y no fue desde la tierra de los pieles rojas y de Emerson y de Martin Luther King desde donde me conminaron a renegar de mi propia familia y hasta de mí mismo para entregarme de cuerpo y alma al Estado Socialista, como si fuese yo propiedad de éste. Nunca vi tanques ni asesores yankees sino rusos en los desfiles militares donde los soldados daban hurras ‒a la usanza soviética y no norteamericana‒ al jefe del ejército. Ni fueron convocados por el Partido Republicano ni por el Demócrata sino por el Comunista de Cuba los actos políticos que eran como masivos lavados de cerebro y que tenían como telón de fondo enormes imágenes de los filósofos y políticos de Europa ‒y no de Norte América‒ Marx, Engels y Lenin. Tampoco aquella doctrina de odio contra todo aquel que tuviese una ideología diferente a la del socialismo era originaria de Carolina del Norte o de Boston ni lo era de estos lugares la idea de la Dictadura del Proletariado y del partido único. No fueron americanos los que terminaron de un plumazo con el más mínimo vestigio de propiedad privada (vendedores de churros y fritas, puestos de frutas y de viandas ‒malanga, ñame, calabaza, papa‒, heladeros, maniseros y merengueros). Aquella despiadada campaña gubernamental contra los pequeños comerciantes fue conocida como Ofensiva Revolucionaria y fue la estocada mortal contra el libre ejercicio de la autogestión de los individuos. E insisto en que no, que no fue en la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos donde se dictó como premisa para las artes y la literatura aquello de «Con la Revolución, todo; contra la Revolución, nada», estableciendo, de tal modo, la censura más férrea, jamás conocida en ninguna otra nación de Latinoamérica, y haciendo añicos el derecho de los ciudadanos a expresarse libremente. No fueron ellos ‒los vecinos norteños‒ los que expropiaron e intervinieron las grandes empresas para convertirlas en presumibles bienes de toda la sociedad, inaugurándose así la era de la ineficiencia y del descalabro inherente a una economía centralizada. Nuestros amigos de la Coca Cola, de la Pepsi Cola y de otras tantas compañías no fueron sino víctimas de tales expropiaciones y saqueos y los cubanos dejamos de beber refrescos que valían la pena y de recibir otros productos y servicios de excelente calidad. Y todavía digo más: los jefes de los pelotones que llevaron a cabo los fusilamientos de miles y miles de cubanos, no gritaban «¡fire!» sino «¡fuego!» ni fueron tropas del pueblo de Lincoln sino multitudes ‒turbas‒ del propio pueblo que, enceguecidas por un fervor como de hienas o atizadas por la mano oculta y tenebrosa de los nuevos líderes, en los primeros días de la efervescencia revolucionaria, salían a las calles a pedir paredón para los que disentían o habían tenido alguna relación con el derrocado gobierno de Fulgencio Batista. En fin, no fueron vaqueros asaltantes de bancos ni gansters de Chicago o New York sino una chusma criolla la que tomó el poder en el ’59 y ha estado manejado a su antojo y con métodos de bárbaros los destinos de los cubanos. Una chusma, una pandilla integrada por asesinos y ladrones y por hombres sin escrúpulos ‒pero muy bien aderezados con aquella barba de libertadores. Era la mismísima peste ‒con muy pocas excepciones‒ lo que bajó de los montes de la Sierra Maestra ‒cercanos a la ciudad de Santiago de Cuba‒, donde se habían alzado en pie de guerra ‒o escondido‒, para luego llegar y posesionarse en el Palacio Presidencial de La Habana. Cuba entera vio por la televisión el aura roja y reverberante del flamante líder de los rebeldes celebrar su victoria y diciendo aquel discurso típico de un encantador de serpientes. Era la hora suprema y feliz de un Atilas, de pedigree gallego ‒y no sajón‒, que afilaba sus uñas y su látigo para flagelar sin treguas a todos sus compatriotas y reducirlos a ciudadanos de segunda categoría. Desde entonces se impuso el terror en el país y se implantó el más vergonzoso apartheid de la historia moderna. Tal segregación continua vigente porque el gobierno cubano ‒y no el estadounidense‒ sigue prohibiendo el acceso de los propios nacionales a ciertas playas e instalaciones hoteleras destinadas exclusivamente al turismo extranjero. Pero no fue el Fondo Monetario Internacional ni los accionistas de Wall Street los que desvalorizaron el peso cubano‒con el que se le paga al obrero y al profesional‒ y lo convirtieron en risible caricatura del dinero para darle valor y poderes excepcionales al dollar y a toda moneda no-cubana y no fueron aquéllos los que crearon un mercado inaccesible para el criollo, a menos que éste reciba remesas o especule. La bestia usurpadora y criminal ‒envejecida en su trono‒ mantiene todavía sometido a nuestro noble pueblo a un bloqueo tan brutal que no tiene comparación con el embargo que la Casa Blanca impusiese al gobierno ‒y no al pueblo‒ de nuestro país como respuesta a la expropiación arbitraria de propiedades y negocios norteamericanos, lo que no fue compensado debidamente... y no merece otro nombre que robo eso de apropiarse de lo ajeno. Sin embargo, para nada me afectó a mí ni a los míos la medida norteamericana. Más bien lo que hay que decir es que han sido bloqueadas nuestras libertades y economías por todas las medidas del Gobierno Revolucionario de Cuba. Ni una sola ley revolucionaria tiene por objeto hacer feliz nadie. Todo lo contrario. Entonces no es resultado de ningún bloqueo o embargo o ley de ningún gobierno extranjero sino del propio, la miseria y el hambre que padecen los cubanos y esa visible tristeza y desesperanza. No fueron los greengos los que crearon artificialmente la escasez de alimentos para implementar la tarjeta de racionamiento y así asegurar la dependencia de cada ciudadano con el Estado y, por tanto, el poder de los pandilleros castristas. ¡Ah… y La Habana está así, en ruinas; no porque aviones tipo Delta de la Fuerza Aérea Norteamericana dejaron caer bombas o lanzaron misiles sobre lo que fuera una de las ciudades más bellas de América Latina sino por la abrupta sustitución de una cultura de prosperidad y amor por una ‒medio paria‒ de desdén y desprecio por nuestras tradiciones y valores! Entonces, ¿qué hacemos los cubanos de la Isla o del exilio discutiendo, como verdaderos injerencistas, con quién debe o no tener relaciones diplomáticas y comerciales los Estados Unidos de Norteamerica? Es que no veo para qué ni por qué hay que exigirle a un presidente extranjero que debe sentarse a la mesa de negociaciones para solucionar un problema únicamente generado por elementos y causas nacionales. Debe quedarnos muy claro que no es un poder foráneo lo que nos oprime y menoscaba nuestras libertades ni lo que nos sumergió en el Infierno. No nos hagamos los ingenuos.
Nuestra bronca es con el Usurpador, que nació y vive en Cuba. (That 's all ).
http://osvaldo-raya.blogspot.com/

Sunday, May 3, 2009

En Cuba…¡A La Luna le faltan muchos aretes!


Ayer tuve la oportunidad de ver un corto de” Los Aretes que le Faltan a la Luna”, un film prohibido en Cuba. Hoy su protagonista esta en Miami trayéndonos una copia del film. Promete ser una fiel visión de la realidad cubana.

Y me quede pensando no en el mensajero sino en el mensaje y tristemente comprendí que en Cuba; se le han perdido muchos aretes a La Luna. La realidad del film estriba en el fenómeno social en que se ha visto inmersa la sociedad cubana. El resquebrajamiento de los valores familiares y de respeto se fue como aretes perdidos.

Que triste y que lamentable el mensaje. Hay películas de ficción, de horror, drama y hasta pornos, pero ver a la familia cubana perderse entre lo moral y lo necesario es patético.

El personaje se basa en una estudiante de periodismo que para que su familia coma tiene que entrar en el horrible mundo en que se ve envuelta, la prostitución, donde madre, abuela y marido hacen de ojos cerrados con tal de subsistir. Esos son uno de los muchos aretes que se le han perdido a La Luna o el régimen se los robo!

¡No podemos seguir permitiendo que el régimen nos quite más aretes!